Podemos e Izquierda Unida han reclamado al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) que haga cumplir a la empresa IRB, adjudicataria del servicio de autobús que cubre la línea Castro-Bilbao, su obligación de recuperar las frecuencias en los términos anteriores a la pandemia. Ambas formaciones ven «inadmisible» que a fecha 1 de marzo no se hayan recuperado aún los horarios previos a la pandemia «especialmente cuando se da la circunstancia que la disposición adicional centésima séptima de la Ley 31/2022, de Presupuestos Generales del Estado, establece la recuperación de las frecuencias previas a la pandemia antes del 1 de marzo».

En este sentido señalan que «es una medida necesaria, que incluso pensamos que se quedará corta, debido a las bonificaciones vigentes desde inicios de febrero». La apuesta del Ministerio de bonificar el transporte público para fomentar su uso es «encomiable y acertada», para las agrupaciones castreñas, «pero se vuelve contraproducente si el servicio es ineficaz, molesto y no digamos si decenas de personas se quedan en tierra al no tener sitio dentro del autobús».

Además, recuerdan que el Plan de inspección de transporte por carretera definido por el Mitma para 2023, habla específicamente del control del cumplimiento de las obligaciones de los contratos de gestión de los servicios públicos de los transportes regulares de viajeros y de la obligación del concesionario de organizar y prestar el servicio con estricta sujeción a las características establecidas en el contrato. Es por ello que «por nuestra parte reclamaremos que se aplique este control para que se restablezcan las frecuencias previas a la pandemia tal y como se aprobó en la ley de presupuestos generales», explica el concejal de Podemos, Alberto Martínez.

En la misma línea, el portavoz de Izquierda Unida en Castro Urdiales, Pablo Villasante, pone sobre la mesa la visita que el pasado febrero realizó la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, a Castro Urdiales, en la que se comprometió a que este servicio volviera a desarrollarse como lo hacía antes de la pandemia. «Promesa que a día 1 de marzo aún no se ha cumplido, pero es que, desde hoy -por ayer-, la promesa se volvía obligación», insiste Villasante.

Y es que se trata, en palabras del portavoz de IU, de «uno de los servicios más importantes para nuestra ciudad ya que miles de personas utilizan esta ruta para acudir al trabajo, estudios, temas sanitarios, culturales y comerciales, así que esperamos que se tomen medidas para recuperar las frecuencias de forma inmediata».

Actualmente entre las 10. 00 y las 12.00, y las 13.00 y 14.00 horas no se ha restablecido el horario cada 30 minutos y se ha suprimido el autobús, afirman. Y por otro lado, los sábados y los domingos «el último autobús Castro-Bilbao es a las 21.00 horas y no a las 22.00 horas que era su horario habitual.