Entregados los galardones de la novena edición de los Premios Cachupín Saturday, 30 December 2023
El acto homenajeó a Zacarías Puente, Quico Taronjí, Marcos López Hoyos, José Emilio Amavisca y el Monasterio de Santo Toribio de Liébana
Ana Bringas
Arnuero
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Sábado, 30 de diciembre 2023, 12:14
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El Hotel Estrella del Norte de Isla fue el escenario el pasado viernes, 29 de diciembre, de la IX Edición de los Premios Cachupín, que reconocen la trayectoria de distintas personalidades vinculadas a Cantabria. En esta ocasión, la cita, organizada por la revista ‘Vivir en Cantabria’, repartió un total de cuatro distinciones a personas y un premio especial al Monasterio de Santo Toribio de Liébana, reconocido como Bien de Interés Cultural y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, por situar a Cantabria como lugar de peregrinaje internacional.
Las personalidades premiadas fueron el hostelero y fundador de la Cofradía de Queso de Cantabria Zacarías Puente Herboso, el periodista y reportero Quico Taronjí, el científico, docente y divulgador Marcos López Hoyos y el futbolista y comentarista deportivo José Emilio Amavisca. El evento fue conducido por Marga Pereda y Adrián Rozas.
El primero en recoger el galardón fue Zacarías Puente, gran promotor de la gastronomía cántabra a nivel mundial quien, sin soltar su vara de madera y al grito de «pecho cántabro adelante», expresó su felicidad ante tal homenaje por su contribución a la difusión de los quesos de Cantabria y a su dilatada trayectoria profesional como hostelero. Puente, natural de Guriezo, fundó en 1964 el restaurante Risco de Laredo, así como la Cofradía del Queso de Cantabria, en 1985, de la que actualmente es Gran Maestre Emérito. Fundó además, el restaurante santanderino que lleva su nombre y que en 2007 obtuvo el Premio Nacional de Gastronomía. Ha sido distinguido con cerca de una veintena de premios y es autor de numerosos libros, como ‘La Cocina de Cantabria’.
Después, de la mano del consagrado actor de doblaje Héctor Cantolla, fue el turno del futbolista José Emilio Amavisca que recibió el premio Cachupín en reconocimiento a su trayectoria deportiva en varios equipos de Primera División y la Selección Española obteniendo, además, una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de 1992. Tras su debut en 1988 en el Club Deportivo Laredo, pasó por clubes como el Real Valladolid y el Lleida para llegar finalmente al Real Madrid, donde estuvo desde 1994 hasta 1999 y obtuvo grandes logros deportivos, como Campeón de Liga, Campeón Supercopa de España, Campeón Copa Intercontinental, así como una Champions League. En 2001 fue fichado por el Deportivo de La Coruña, donde obtendrá también una Copa del Rey. «No es fácil que se acuerden de ti después de tantos años retirado del fútbol», indicó Amavisca en señal de agradecimiento.
Por su parte, Quico Taronjí recogió el galardón de la mano del organizador del evento, Mariano Riego, por su carrera como presentador y reportero en diferentes cadenas de televisión nacionales y autonómicas como TVE, Telecinco, Antena 3, Telemadrid o Canal Sur TV. Santanderino de nacimiento, Taronjí es licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad del País Vasco y actualmente presenta los domingos el programa ‘Aquí la Tierra’. Además es fundador y productor ejecutivo de Quebec Films y ha creado diferentes ormatos audiovisuales y proyectos de aventura como ‘Capitán Q’. El reportero señaló en su intervención que le otorgan el premio por vender Cantabria, pero «es la cosa más fácil del mundo porque hasta yo mismo me sorprendo de lo bonita que es mi tierra».
Como última personalidad premiada, el inmunólogo, investigador y divulgador Marcos López Hoyos recibió el reconocimiento a sus 31 años de recorrido profesional. Cuenta con más de 300 trabajos indexados, ha dirigido 18 tesis doctorales y ha rendido muy significativos servicios a la ciudadanía durante la pandemia mediante innumerables apariciones en todo tipo de medios. En su intervención, López Hoyos recordó, «abrumado» por el reconocimiento, la crudeza la pandemia del covid 19 que «puso a los inmunólogos en primera línea».
Para concluir, el premio más especial lo recogió en representación uno de los cuatro monjes franciscanos que habitan en el Santuario de Santo Toribio de Liébana, en concreto el padre José María Lucas, guardián del templo que albergó la creación de las obras de Beato de Liébana y conserva la reliquia del Lignum Crucis, el trozo más grande conocido de la cruz donde murió Jesucristo, lo que lo convierte uno de los lugares santos más importantes de la cristiandad con peregrinación extraordinaria que atrae a Cantabria a millones de personas. El padre, ataviado con su hábito marrón, deseó que el monasterio «siga siendo foco espiritual y turístico los próximos años».
