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Una obra colaborativa de Eugenio Ampudia convierte al público en árboles Friday, 22 December 2023


El artista electrónico crea una plataforma para que las personas realicen una coreografía del Centro Nacional de Danza y proteste así contra el cambio climático


Doménico Chiappe

Doménico Chiappe

Madrid

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Sábado, 23 de diciembre 2023, 00:42

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En su nueva obra, el artista Eugenio Ampudia se dispone a convertir a las personas en un gran bosque. Mediante una aplicación disponible para cualquiera, la persona se graba a sí misma en una especie de metamorfosis en que los brazos simulan ramas y las piernas troncos. «La idea surge de mi empleo de la técnica, de saber que puedo reunir fotogramas mientras alguien se mueve y que así podía convertirlo, visualmente al menos, en árbol», explica Ampudia (Valladolid, 1958), sobre este trabajo que contiene la protesta climática en el centro. ¿Por qué un árbol, por qué un bosque? «Compartimos más de la mitad de nuestro ADN con los árboles», responde a este periódico. «Ellos se ocupan de capturar el CO2 y de lanzar oxígeno a la atmósfera, lo que hace que podamos vivir. Necesitamos revisar nuestra relación con el resto de las especies».

La obra ‘Be a tree now!’ –que cuenta con el apoyo de Oxfam, Unión Europea y la plataforma Spark– busca remover la conciencia del público, invitándole a participar en esta performance colaborativa. «Cuantos más árboles haya, más grande será el bosque. El resultado final será un vídeo que yo haré con todos los árboles». Esta pieza se exhibirá en varias pantallas, donde «se acumularán los árboles uno tras otro, primero grandes y luego más pequeños para que quepa el mayor número de personas. Será una experiencia multisensorial, con el sonido del pequeño baile de unión con la naturaleza. Creo que eso dará idea de la unión de los humanos en torno a un tema que nos preocupa».

La puesta en marcha de este complejo proceso creativo comenzó poco antes de la inauguración de la Cumbre del Clima de este año, que se celebra en Arabia Saudí. «La pieza la hemos hecho para protestar que la Cumbre del Clima se desarrolle en un país financiado absolutamente por la industria fósil, que además es una teocracia, que hace que la democracia se aleje de la lógica del poder», explica Ampudia. «Estamos en un momento problemático, hemos sobrepasado muchas barreras por no respetar el medio ambiente, y la situación de salida es complicada».

Con obras anteriores como ‘Concierto para el bioceno’, ‘Mala hierba’ o ‘Canal huerto’, Ampudia busca exponer «nuestra relación con el planeta y cómo lo deterioramos hasta hacer inviable la vida de los humanos», a partir de «un conjunto de mensajes sobre los que discutir», reflexiona Ampudia. «Mi trabajo como artista aborda cuestiones preocupantes e interesantes para todos. Consiste en mirar a mi alrededor, sacar conclusiones y contárselas a la gente de forma cercana e íntima. Llevo ya bastante tiempo haciendo piezas de la crisis climática, nuestra posición en el planeta y la relación con otras especies».

Baile vegetal

Las primeras grabaciones fueron organizadas por Ampudia en espacios públicos, y ocurrieron en Barcelona y Madrid, gracias a la complicidad de la Compañía Nacional de Danza, cuyos miembros se implicaron en un baile transformador, que sentó las bases para las siguientes participaciones. «Ha sido delicioso verles hacer la pieza. Evidentemente no es necesario seguir los movimientos exactos de los bailarines. También hay ejemplos de gente haciendo lo que puede y quiere. Así también hablamos de la diversidad».

Con el equipo encabezado por la comisaria Blanca de la Torre, el músico Juan Manuel Artero y el desarrollo técnico de Hyper Studio, el artista espera presentar la obra a comienzos del próximo año, mientras estos días sigue recibiendo los vídeos de los espontáneos, ya unos 500 –aunque esperan «miles»–.

Definida como una «obra colaborativa donde se aborda la justicia climática y la emergencia ecológica», según De la Torre, la pieza se apoya en «una plataforma digital que ofrece a los visitantes la posibilidad de transformarse en árbol». Después de capturar un QR y apretar un botón, el participante ejecuta una «danza durante 30 segundos mientras escucha una música de fondo». Esto se graba desde el móvil y la app devuelve un archivo digital que contiene ese vídeo, gracias a fijar las diversas etapas de sus movimientos y hacer así crecer una frondosa copa vegetal a partir de dos brazos y diez dedos.

El archivo está listo para divulgar en redes sociales y hay instrucciones para los menos intuitivos. Al mismo tiempo, cuando el usuario decide compartirlo con el artista, se aloja en una web para usarse luego en el «vídeo vertical» con los «árboles participantes». La performance, además de ocupar espacios expositivos, también se instalará en los móviles.

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