Está claro que no era su día. Un varón de 32 años de edad tuvo un accidente ayer en Cueto. «Por esquivar a unos chicos que iban en patinetes se estrelló» contra un muro y tuvo que ser trasladado a Valdecilla, donde quedó ingresado porque llegó con varias heridas. Pero su mala suerte no había hecho más que empezar: los agentes de la Policía Local que se pusieron a instruir el informe técnico correspondiente comprobaron que sobre la motocicleta accidentada pesaba una denuncia por sustracción, que se había formalizado justo ayer, lunes.

No acabó aquí la cosa. Además de descubrirse que su moto era robada, al motorista herido se le incautaron dos tarjetas de crédito a nombre de otra persona y, tras hacerse las indagaciones oportunas, se averiguó que habían sido sustraídas de un vehículo estacionado y que habían sido utilizadas fraudulentamente. En el hospital, la Policía también ordenó la extracción de una muestra de sangre para determinar si el treintañero pudiera haber conducido bajo la influencia de alcohol o de algún tipo de droga. Y lo que empezó siendo un siniestro de tráfico acabó con unas largas diligencias policiales, ya que se le han instruido expedientes por tres delitos: uno por robo de vehículo a motor, otro por robo de efectos en interior de vehículo y un tercero de estafa por la utilización de tarjetas de crédito presuntamente sustraídas.

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Los hechos empezaron en la calle Camus. Allí, según una testigo presencial de lo ocurrido, tres chicos llevaban un rato «haciendo el idiota por la calle con unos patinetes eléctricos. Iban sin casco» y, en un momento dado, se metieron con los patinetes «por una calle en dirección prohibida» para ellos. Fue en este momento cuando entró en esta vía una moto, cuyo conductor, por evitar a los chicos, se empotró «contra una tapia de piedra». Siempre según ese testigo, el motorista quedó tendido en el suelo y herido, mientras los que iban en patinete abandonaban en lugar. Fuentes policiales han confirmado que se les está buscando.