Los jóvenes también son un ejemplo de solidaridad. La mejor prueba está en el alumnado del Instituto San Miguel de Meruelo que se ha volcado en la iniciativa promovida por el centro para recaudar fondos a favor de Cáritas Santoña. Durante el mes que ha durado la campaña han recaudado, con la participación del profesorado y de las familias, un montante de 811 euros. Una cantidad que han entregado este jueves a varios representantes de Cáritas, que se lo han agradecido enormemente ya que «nos hace más falta que nunca» para destinarlo a las personas necesitadas del municipio.

La campaña solidaria, que se realiza en el centro desde hace ya varios años, ha sido impulsada por los departamentos de Religión y Valores Éticos. La actividad anima a todos aquellos que integran la comunidad educativa del instituto a donar como mínimo la cantidad simbólica de un euro. El profesor de Religión, Joaquín Cagigas, ha explicado que la campaña viene originada por la «necesidad que existe en las familias que se encuentran en un paro prolongado y sin ningún tipo de ayuda». En este sentido, ha apuntado, que los meses siguientes a las navidades son «bastante difíciles», ya que «la gente se olvida de la crisis en la que nos encontramos y que está provocando que aumenten las personas que acuden a Cáritas».

La iniciativa se ha desarrollado del 9 de febrero al 9 de marzo. El objetivo principal ha sido transmitir a los estudiantes la idea de solidaridad e incitarles a ser generosos ya que a estas edades les cuesta más desprenderse de los propio. Se trataba, en definitiva, de que harían un pequeño esfuerzo. «Estamos muy contentos y agradecidos de la respuesta que han tenido los alumnos así como sus familias y los profesores», ha destacado Cagigas.

Los estudiantes de 1º de Bachillerato del instituto de San Miguel Meruelo, Eva Ruiz y Héctor Velasco, en nombre de todos sus compañeros, han formalizado la entrega del sobre con el dinero recaudado. «Es una cifra superior a la del año pasado por lo que estamos muy contentos», han contado orgullosos ambos jóvenes. Esta campaña sustituye a otra que se llevaba a cabo anteriormente en la misma línea ‘Operación Kilo’ y está «muy bien» porque «cualquier alumno puede participar donando un euro o más y a poco que dé cada uno, se junta una cantidad importante». Y es que, han apuntado, con algo del dinero que destinan a comprarse el bocarte o golosinas a la hora del recreo se podía ayudar fácilmente. «No cuesta nada hacerlo». Además, ha señalado Héctor, también nos indicaron que podíamos comunicar si conocíamos a alguien necesitato para que les prestarán ayuda.

Por parte de Cáritas Santoña, han estado presentes en el acto su coordinador, José Francisco Rodríguez Seco, y las voluntarias, Ana Navarro y Susana Navarro. «Este año viene todavía mejor que otras veces. La atención que prestamos es gracias a la caridad y colaboración de los ciudadanos y estos últimos tiempos estamos recibiendo menos donaciones pero vienen más personas; por lo que está ayuda de Meruelo nos viene muy bien. Estamos muy agradecidos».

El dinero se destinará principalmente a atención primaria. Prestan apoyo económico a las personas sin recursos para la compra de alimentos, el pago del alquiler, de las facturas del agua, luz y gas o para adquirir medicamentos en las farmacias, entro otros gastos vitales. Igualmente, les proporcionan vales para que puedan adquirir una serie de prendas en la tienda Koopera, que tiene Cáritas Diocesana, en la calle Cádiz, de Santander.

La actividad de Cáritas Santoña se presta en los bajos de la parroquia. Los jueves por la tarde, los voluntarias atienden a cada familia en un encuentro personal de unos 20 minutos en los que se interesan por su situación y las necesidades que, por problemas económicos, no pueden cubrir, ofreciéndoles las vías de ayuda a su alcance.

La campaña ha incluido la impartición de dos charlas en el instituto la labor de Cáritas a los alumnos del instituto que cursan 1º de la ESO. A las mismas han acudido Rodríguez Seco y Navarro, junto a una integrantes de Cáritas Santander, Estefanía. «Les hemos visto muy receptivos. Se les explicó un poco la labor de Cáritas Diocesana en general, y, luego, nos centramos en la actividad que se lleva a cabo en Santoña». Héctor ha valorado positivamente estas charlas porque contribuyen a «crear conciencia» en los alumnos. «Si no conoces la causa no te importa, y de esta forma puede conocer, a través de los testimonio de los voluntarios, a gente que ha necesitado o necesita este tipo de ayudas y empatizas con ellos».