Uno de los motivos de la tremenda popularidad que ha adquirido esta cita gastronómica en su última edición podría ser la profesionalización de los pinchos, según señalan desde la organización. «Contar con un jurado profesional premiado con estrellas Michelin ha sido un revulsivo que da juego y publicidad», indican.

No obstante, la valoración del jurado profesional, conformado por los galardonados cocineros Mikel Población, de los establecimientos Atelier y la Despensa de Etxanobe en Bilbao; Zuriñe García de El Paladar en Portugalete; Eduardo Quintana de La Bicicleta en Hoznayo; Nacho Solana del Restaurante Solana en La Aparecida; Sergio Bastard de La Casona del Judío en Santander y Bruno, cocinero en El Cenador de Amós ubicado en Villaverde de Pontones, no ha diferido demasiado de la del público, ya que ambos han coincidido en el primer y segundo puesto.

El ganador de la Ruta del Pincho es la Cafetería Paréntesis con su propuesta ‘Infladito’, un bocado que mezcla gastronomía de diferentes culturas, desde la india con la base de panipuri, un pan que al freír se infla y gracias al cual recibe su nombre, hasta la cocina más tradicional que está reflejada en el relleno del pan con unas carrilleras estofadas, pasando por la japonesa con la salsa estilo barbacoa yakiniku, o la americana desde México hasta Estados Unidos con especias y otras salsas. Además, el pincho incluye papada de cerdo cocinada al vacío a 65 grados durante 18 horas, yogur griego, lima rallada y corteza de cerdo triturada.

Por su parte, el segundo puesto, tanto para el jurado profesional como para el popular, lo mereció Los Chelines con su pincho ‘Carri_Puri’. En tercer lugar, los cocineros colocaron a Almacén 27 con ‘Canallada’, mientras el público premió a La Cassette con ‘Tocata’. Asimismo, el premio a la mejor atención fue para el establecimiento Barlovento con su propuesta ‘Sotavento’, y el galardón a la mejor atención fue para Lazur, con ‘Zezinho’.