Jaime, uno de los conductores afectados, dejó finalmente el coche en La Lechera después de dar «unas cuantas vueltas» por la zona. El comercio del entorno también sufre las molestias. «Nos afecta porque muchos de nuestros clientes son de los pueblos del entorno», señalaba Sergio, que trabaja en uno de los establecimientos más emblemáticos (Motor Jesús Saiz) y acudió a su puesto «andando desde la otra punta de la ciudad». Su jefe, Jesús, lo confirmaba: «Vamos a pasar unos meses jodidos, pero luego será una maravilla. He echado en falta que ofrezcan una alternativa, pero habrá que tener paciencia. Espero que la Policía Local sea flexible con los que aparcan un momento en vados o en carga y descarga». Emilio, de la frutería El Campo, también está dispuesto a «capear el temporal como se pueda», porque «a corto plazo vamos a estar jodidos, pero al final va a quedar bien».

La Carmencita es una finca llana de 9.750 metros cuadrados, que el Consistorio adquirió a una constructora en 2003. Desde entonces es destinada a estacionamiento gratuito en superficie, siendo muy utilizada tanto por vecinos como por visitantes. La parcela tiene forma triangular y se encuentra en la confluencia de las calles José María de Pereda y Hermilio Alcalde del Río con la glorieta de entrada a la ciudad, conocida popularmente como el ‘Donuts’ de La Inmobiliaria.

Tras fracasar un proyecto similar en legislaturas anteriores, el Ayuntamiento adjudicó la obra a la UTE Parking La Carmencita en octubre de 2022. El edificio tendrá cuatro alturas y se crearán 539 plazas. El presupuesto es de 4,6 millones, de los que 2,7 corresponden a fondos europeos. Después de una nueva demora de más de un año, el Consistorio colocó el pasado miércoles unas vallas en el aparcamiento anunciando su cierre y el comienzo de los trabajos tras la Semana Santa.

Los conductores fueron desalojando poco a poco el estacionamiento durante el fin de semana y este martes apenas quedaban medio centenar de vehículos en la finca. Los más rezagados serán trasladados por la grúa municipal a la zona del aparcamiento –la más cercana a la rotonda– que no se verá afectada por la obra y seguirá siendo parking gratuito. Tendrá medio centenar de plazas.

Aunque a primera hora estuvo presente la Policía Local, no se registró ningún incidente y la mayoría de los usuarios buscó una alternativa en el barrio o zonas próximas ya tensionadas por la falta de estacionamiento, como la del entorno del cementerio de La Llama. Durante la jornada se firmó el acta de replanteo y se puso la finca a disposición de las empresas adjudicatarias. También comenzaron los trabajos de vallado. La obra supondrá también la tala de 12 árboles de gran porte.