Hace días que dejaron de ser un hecho aislado. Los delitos de suplantación de identidad que desde la semana pasada sufren algunos ayuntamientos de Cantabria apunta a una ola de ataques en toda regla dirigida a multitud de administraciones. Primero fue en Polanco, El Astillero y San Felices de Buelna; ahora, la lista de víctimas alcanza a Torrelavega, la segunda ciudad de la comunidad autónoma, que ya ha interpuesto una denuncia ante la Policía Nacional para esclarecer los hechos.

Entre tanto, el concejal de Seguridad, Pedro Pérez Noriega, confirma un ataque de características idénticas al de otros municipios: la suplantación de identidad de personal municipal en diferentes correos electrónicos dirigidos a adjudicatarios de contratos municipales. Según ha informado este lunes, el Consistorio ya se ha puesto en contacto con dichas empresas explicando lo sucedido y, sobre todo, lo que deben hacer si han realizado uno de esos correos: «No duden en confirmar telefónicamente con el responsable del contrato en cuestión la veracidad de la misma, y no remitan ninguna documentación a través de cauces no oficiales (como es el caso del correo electrónico)», insta la misiva municipal.

En ella, además de confirmar la falsedad de los mensajes, el Consistorio avanza a las afectadas el objetivo con el que han sido contactadas: «Obtener datos con los que realizar un fraude». Para hacerse una idea de cómo funciona este engaño, los estafadores envían un correo electrónico a las adjudicatarias haciéndose pasar por un funcionario de la Administración municipal (el secretario, la jefa de contratación…) y solicitando diversa documentación a la empresa, como si fuera un mero trámite relacionada con el contrato adjudicado. Les piden el número de cuenta, facturas, ficha de terceros… Ahí es donde atacan.

Esa no es la forma en la que un Ayuntamiento se relaciona con una adjudicataria en este tipo de trámites. Y lo deja clara la misiva enviada por el Consistorio de Torrelavega: «Ninguna persona de este Ayuntamiento les puede o debe solicitar dichos datos sino es a través de los cauces formales establecidos al efecto (notificaciones oficiales, plataforma de contratación, etc)».